La ha encontrado un voluntario de una organización australiana: nace un ejemplar albino de la especie cada 100.000 huevo.
Un voluntario del grupo medioambiental Coolum and North Shore Coast Care ha encontrado un raro ejemplar de tortuga verde: una cría albina en la playa de Castaways, en el estado australiano de Queensland. «Tiene los ojos de color rosa y parece blanca con la nieve»; así la describe Linda Warneminde, presidenta de la asociación.
Los técnicos estuvieron monitorizando el nido antes y después de la eclosión de los huevos. Y cuando fueron a contabilizar el número de cáscaras rotas (un total de 122) se encontraron con la pequeña cría albina.
El nacimiento de una cría de tortuga albina es algo excepcional, puede encontrarse un ejemplar entre cien mil huevos puestos. Y su tasa de supervivencia es muy baja debido a que la ausencia de los patrones de color característicos de su especie para mezclarse con su entorno las convierte en blancos perfectos para los depredadores. Solo alcanza la madurez una de cada mil tortugas albinas, explica el responsable científico de la Unidad de Especies Amenazadas del Gobierno de Queensland, Col Limpus, a la cadena de noticias australiana ABC.
Los técnicos estuvieron monitorizando el nido antes y después de la eclosión de los huevos. Y cuando fueron a contabilizar el número de cáscaras rotas (un total de 122) se encontraron con la pequeña cría albina.
El nacimiento de una cría de tortuga albina es algo excepcional, puede encontrarse un ejemplar entre cien mil huevos puestos. Y su tasa de supervivencia es muy baja debido a que la ausencia de los patrones de color característicos de su especie para mezclarse con su entorno las convierte en blancos perfectos para los depredadores. Solo alcanza la madurez una de cada mil tortugas albinas, explica el responsable científico de la Unidad de Especies Amenazadas del Gobierno de Queensland, Col Limpus, a la cadena de noticias australiana ABC.
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