Personas con Alergia a las Mascotas

Alrededor de un 15% de las personas tienen la mala suerte de ser alérgicas a algunas mascotas. Los animales que causan este problema más comúnmente son los perros y gatos, que son también las mascotas más habituales en las casas.

La mejor recomendación para estas personas es no tener animales o escoger uno sin pelos, como los reptiles, pero a veces la alergia surge después de haber tenido uno por varios meses o también ocurre que los niños desean tanto un compañero que accedemos a intentar convivir con una mascota en casa.

Recomendaciones que disminuyen las reacciones alérgicas

La regla número uno y más importante es que el animal no debe tener acceso a los cuartos, que es donde la persona alérgica pasa más tiempo y está en contacto directo con telas, cojines y colchón. Es mejor que la mascota esté fuera de la casa o restringida solo a los ambientes más ventilados. Las sustancias que causan alergia se desprenden constantemente del cuerpo del animal y quedan en el ambiente, por eso es importante que no haya alfombras, aspirar el suelo a diario y los muebles más o menos cada 15 días; para esto es importante usar una aspiradora con un filtro eficaz que no libere las partículas alérgenas nuevamente al aire donde éstas queden alojadas por mucho tiempo. El suelo de madera es más fácil de limpiar, al igual que los tapizados de cuero sintético o telas impermeables similares.

Las mascotas deben tener su propia cama y no utilizar los sillones para descansar. Esto facilita el control de alérgenos en el ambiente, pues alcanza con lavar la funda a 60ºC regularmente. Mejor aún si el colchón está forrado con un plástico o una lona impermeable por debajo de la funda, así las partículas no quedan alojadas en el cojín.

Las sustancias responsables de la alergia se encuentran por lo general en la saliva; cuando el animal se lame las esparce por su cuerpo y de ahí se liberan al ambiente. Entonces se recomienda darle un baño cada 7 a 15 días aproximadamente, tanto a perros como a gatos. Esto ayuda a disminuir la carga de alérgenos sobre su piel y, en consecuencia, en la casa.

Otra acción que ayuda mucho es cepillar a diario a los animales fuera de la casa. Esto, obviamente, no debe hacerlo la persona alérgica. También hay sustancias alergénicas en la orina, de modo que hay que limpiar con frecuencia la bandeja sanitaria de los gatos y, de ser posible, utilizar una con tapa para evitar que se diseminen por el aire.

Existen en la actualidad productos que ayudan aún más a las personas alérgicas con mascotas. Se trata de limpiadores y lociones que se aplican directamente sobre la piel de los animales y disminuyen en un gran porcentaje la cantidad de alérgenos. Estos productos están avalados por Allergy UK, una asociación médica líder en la ayuda a personas con alergia, pues existen numerosos reportes de efectividad.

Si estas medidas no dan resultado, si la persona es asmática o el médico recomienda no tener una mascota, entonces lamentablemente lo más indicado será buscar un nuevo hogar para el perro o gato y priorizar la salud de los integrantes de la familia.