Si eres dueño de un gato y te gusta decorar tu casa por Navidad, tu mascota estará de enhorabuena en estas fechas. Desde el momento en que pongas la decoración, tu fiel compañero tendrá diversión asegurada ya que ¡es como si montaras un parque de atracciones en casa!
Con este artículo te queremos dar algunos consejos para que tanto tu gato como los adornos navideños consigan sobrevivir a estas fiestas.
Elegir el árbol de Navidad y su ubicación: qué tener en cuenta
Todos sabemos que a los gatos les encantan las alturas. Cuanto más grande pongas el árbol mayor será la tentación de subirse a él. Te recomendamos un tamaño mediano o pequeño y mucho mejor si es un árbol de navidad artificial. Los árboles naturales tienen las hojas muy afiladas y podrían llegar a lastimar a tu gato mientras curiosea en él, además de que llamará mucho más su atención.
Al elegir el sitio donde colocarlo evita que esté cerca de otros muebles que puedan usar de trampolín. Fija la base lo mejor posible y si puedes afiánzalo con algo como un hilo de pescar a la pared. ¡Así habrá menos posibilidades de que tu árbol acabe en el suelo!
La decoración navideña
Lo mejor es que optes por decoración de plástico o materiales que no se rompa al caer al suelo.
Si usas luces, ponlas en la parte menos accesible de las ramas. Los gatos sienten una atracción fatal por las luces cuando están encendidas. Evidentemente, no no son conscientes de que pasa corriente por ese “juguete” tan interesante y al morderlas podrían causarles heridas o quemaduras. Es muy importante que las luces estén siempre desconectadas si no estás presente, así evitaremos algún que otro susto.
El momento de decorar el árbol
Aunque tengas ganas de jugar con tu gato mientras pones la decoración navideña, esto no es una buena idea. Él verá los adornos como un juguete y puede que esta idea no se le olvide tan fácilmente. Es probable que mientras tú vas colocando bolas en el árbol él las irá tirando a su antojo.
Desde el momento en que este adorable compañero entró en tu vida supiste que ya no ibas a ser como cualquier otro mortal que pone una vez al año el árbol en navidad. Desde ahora armarás tu árbol al menos una vez al día, como si del día de la marmota se tratara, hasta que la Navidad acabe o hasta que el árbol aguante.
¡Árbol vaaaaa…!
Aun así, después de todos estos consejos, es posible que nada de esto funcione y tu árbol sufra un fatídico fin.
¿Has llegado alguna vez a casa y te has encontrado el árbol de Navidad tirado en suelo y todas las bolas esparcidas, como si una batalla campal se hubiera librado en casa? Lo más probable es que te encuentres a tu gato con cara de “yo no he sido”. De forma resumida, podríamos decir que la suma de un árbol de Navidad en casa y nuestro gato quedaría así:
Como ves, queda garantizado más de un momento de diversión durante estas fiestas. En caso de que por algún motivo quisieses evitar alguno de estos pequeños desastres, recuerda que existen repelentes educativos para gatos que te pueden ser de ayuda y que encontrarás en tu tienda de mascotas. La mayoría se presentan en forma de spray y al rociarlo sobre el árbol, les disuadirá de la idea de entretenerse con la decoración de Navidad.
¿Y vosotros? ¿Tenéis alguna historia divertida de vuestro gato y la decoración navideña? ¿Conseguís que el árbol sobreviva intacto hasta el final de las Navidades?
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