Vuelta al Cole: ¡atentos a la Ansiedad por separación de vuestros Animales!

Nuestros peludos también padecen transtornos con la vuelta al cole de la familia.

Tras una época en la que vuestros animales de compañía han pasado la mayoría del tiempo con vosotros, la ansiedad por separación o la depresión son los problemas que pueden presentar tras las vacaciones. Estar atento a los síntomas y actuar es necesario para evitar que sufran ellos y vosotros.

Septiembre. Colegio. Trabajo. Horas de soledad. Tras una época en la que vuestros animales de compañía han estado la mayoría del tiempo con vosotros, llega la hora de la verdad. La hora de quedarse solo en casa muchas horas. Algunos animales sufren en este periodo de depresiones o del llamado síndrome de ansiedad por separación. Sólo necesitas estar atento y actuar si muestra algún síntoma.

¿Tu animal no tiene ganas de hacer nada, está tumbado todo el día, no quiere comer ni jugar, se esconde o huye? Tu perro está deprimido. Si en cambio se pasa el día ladrando, gimiendo o lloriqueando, araña las puertas, paredes o muebles o hace sus necesidades dentro de casa, lo más probable es que padezca el llamado síndrome de ansiedad por separación.
A su manera, los animales, sobre todo los perros, pueden sufrir también del fin de las vacaciones. Volver a la normalidad significa pasar horas solo, que sus dueños no dispongan de tanto tiempo para hacer actividades con él.

Aquí os damos algunos consejos para que la transición sea menos dolorosa:

1. La rutina: el verano favorece que los horarios se flexibilicen y las rutinas de nuestro animal pueden haberse descontrolado. Es importante, volver a establecerlas poco a poco. A los perros les tranquilizan las rutinas.
2. Si es posible, que vaya quedándose sólo de forma gradual. Aunque te cueste un esfuerzo, los primeros días vé a casa al mediodía, mímalo y sácalo a dar un paseo corto y relajante.
3. Explicita la misma rutina que haces antes de salir de casa (coger las llaves, abrir la puerta, ponerte el abrigo, etc...) durante algunas veces SIN salir de casa, para que no relacione tus gestos con el hecho de irte.
4. Cuando te vayas puedes dejarle algún juguete para que se entretenga, tipo Kong (como en la imágen). Los primeros días puedes dejarle una radio o la tele a volumen flojito.
5. Cuando llegues a casa, dedícale un rato a jugar, y darle mimos. Pero no lo hagas en el momento de llegar; espera que esté calmado.
6. Los paseos, tanto el paseo de la mañana como el de la noche deben tender a ser relajados, sobre todo el de la mañana. Por la noche, puedes llevarlo a un parque a jugar con otros perros además de caminar un poco, pero lo aconsejable es primero el parque, después el paseo, que llegue a casa relajado. Por la mañana, mejor que sea un paseo para caminar, olisquear y hacer sus necesidades. Que no tenga mucho estímulo para que no le cueste volver a un estado de relajación cuando se quede solo.
7. Sé paciente. No le riñas si rompe cosas o ladra. No sirve para que aprenda y sí sirve para empeorar tu relación con él.Si ves síntomas de depresión, consulta a un veterinario. Hay muchos remedios de medicina natural que le pueden ayudar. También será muy útil consultar a un educador canino.